Pero esta información no es cierta, puesto que no fue la cobardía sino el desprecio lo que motivo a Jonás a no obedecerle a Dios, el sabía que Nínive capital Asiría para la época era el centro de perversión más grande del centro de perversión más grande del mundo antiguo y por ende pensaba que ellos no eran merecedores de la gloria de Dios, incluso en el capítulo final del libro se nota la ira de Jonás por haber permitido que los habitantes de dicha ciudad se salvará.
Es aquí de donde deriva el síndrome de Jonás, que no es más que las personas no conozcan el evangelio de Cristo para salvación de sus almas y perezcan y vayan al infierno, de hecho en el Nuevo Testamento los Boanerges (Juan y Jacobo) emplazaron a Jesús a que consumiera una ciudad entera, así que el síndrome de Jonás no es algo que haya caducado todo lo contrario esta en franco auge.
Usted podrá pensar que soy muy exagerado sin embargo este servidor sufrió el mismo síndrome alguna vez y el mismo Señor me sacó de mi error, tenia resistencia a predicarles a las personas borrachas o que bebieran alcohol incluso no los consideraba dignos del evangelio asi que nunca les abría la boca para llevarles las verdades del evangelio. Entonces el Señor en un año me mandó solo personas alcohólicas para predicarles así que obligado tuvo que vencer mi propio tabú.
Al igual que mi personas la mayoría de creyentes podemos tener resistencias de predicarles a cierto grupo de personas entre los que se encuentran:
1. Borrachos
2. Prostitutas
3.Homosexuales
4. Mendigos o Pordioseros
5. Jóvenes
Si nuestro Señor Jesucristo estuviera físicamente entre nosotros el les predicaría a esos grupos de personas tal como lo expresa la misma palabra:
Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: ``Mirad, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores. Pero la sabiduría se justifica por sus hechos. Mateo 11:19
Recuerden la medicina es para los enfermos no para aquellos que se "creen" sanos
Dios les bendiga ricamente.
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